11/08/2010

Expulsados del limbo…........ 5 años después


Siete de los 47 ‘banglas’ de Melilla han sido deportados
Peridiodismo Humano.

Los otros 40 han sido puestos en libertad y repartidos por varios puntos de la península.

Los deportados fueron abandonados a su suerte en la capital sin dinero ni recursos para volver a sus ciudades con sus familias.

Durante los dos meses que han pasado encerrados en el Centro de Internamiento de Barcelona, los 47 bangladesíes han descontado pacientemente los días con la incertidumbre de si el gobierno español finalmente llegaría a un acuerdo con el de Bangladesh para realizar la deportación del grupo. Al final, de los 47, solo 7 han sido enviados a su país.

El viernes por la tarde, cuando se había cumplido el plazo máximo de 60 días que, según la Ley de Extranjería, puede pasar un extranjero en un CIE, las puertas del recinto se abrieron. Los primeros en salir fueron los siete expulsados. “Los policías dijeron los nombres de los siete.Cuando se los llevaron, pensamos que iban a dejarlos libres y que el resto seríamos deportados”, cuenta Islam, uno de los que se ha quedado en España.

Fue al contrario; los siete fueron metidos en un autobús que los trasladó al aeropuerto y enviados en un vuelo militar a Bangladesh. Según han denunciado los propios inmigrantes, pasaron casi un día en el aeropuerto de Dacca, la capital, sin poder pasar la aduana, porque no llevaban pasaportes y no eran reconocidos como ciudadanos de su país por el gobierno bangladesí.

Los bangladesíes aseguran que fue la propia policía española la que les proporcionó un teléfono para que llamaran a sus familias y así demostrar que se trataba de personas originarias de Bangladesh.

Después de horas retenidos, la policía bangladesí permitió la entrada de los siete que fueron abandonados a su suerte en la capital, sin dinero ni alternativas para volver a sus ciudades con sus familias. Islam ha conseguido hablar desde España con uno de ellos, Hassan Rubiul. “Está desesperado. No puede ir a su casa porque no tiene dinero“, asegura. Hassan llevaba cinco años en Melilla. “Para hacer el viaje a España dejó a su familia con muchas deudas.

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