8 de Marzo
Por la igualdad de derechos.
Contra el Patriarcado y la Ley de Extranjería.
Contra el Patriarcado y la Ley de Extranjería.
Este 8 de Marzo, día Internacional de la Mujer, tenemos que exigir como una demanda conjunta de las mujeres que vivimos en Catalunya la derogación de la Ley de Extranjería.
Es falsa la idea de que el inmigrante solo es un hombre, en Catalunya la cifra de mujeres inmigrantes va en aumento y la manera en que esta ley afecta sus vidas es marcadamente diferente que en el caso masculino. Aquí como en tantos otros casos, leyes y patriarcado nos discriminan
Es falsa la idea de que el inmigrante solo es un hombre, en Catalunya la cifra de mujeres inmigrantes va en aumento y la manera en que esta ley afecta sus vidas es marcadamente diferente que en el caso masculino. Aquí como en tantos otros casos, leyes y patriarcado nos discriminan
1.- Las mujeres inmigrantes, madres y trabajadoras sufrimos una doble discriminación: El trabajo es un derecho y la vida familiar también, si no tenemos papeles ambos derechos se nos niegan. Aún con papeles, estos derechos nos son recortados
Cuidamos niños y niñas de las mujeres autóctonas, pero ¿quién cuida de nuestras hijas e hijos? Actualmente no podemos contar con la ayuda de nuestras familias ya que la última modificación de la Ley de Extranjería restringe la reagrupación familiar de los ascendentes hasta los 65 años, situación que eleva el riesgo social de las familias y nuestra vulnerabilidad.
La ruptura de la unidad familiar da como resultado a madres sobrecargadas de trabajo así como hijos e hijas que ejercen de padres y en la mayoría de los casos hombres que no asumen sus responsabilidades paternas. Las mujeres somos víctimas de una relación que a veces nos oprime y al romperla somos también víctimas de esta ruptura.
Si la mujer no retrasa la maternidad, sufre las consecuencias de una organización social patriarcal que no permite conciliar vida laboral y vida privada. Así, las madres que trabajan se ven obligadas a aceptar jornadas parciales con la consiguiente pérdida retributiva, se estancan en su ascenso profesional, cuando no se ven obligadas a abandonar el mercado de trabajo.
Cuidamos niños y niñas de las mujeres autóctonas, pero ¿quién cuida de nuestras hijas e hijos? Actualmente no podemos contar con la ayuda de nuestras familias ya que la última modificación de la Ley de Extranjería restringe la reagrupación familiar de los ascendentes hasta los 65 años, situación que eleva el riesgo social de las familias y nuestra vulnerabilidad.
La ruptura de la unidad familiar da como resultado a madres sobrecargadas de trabajo así como hijos e hijas que ejercen de padres y en la mayoría de los casos hombres que no asumen sus responsabilidades paternas. Las mujeres somos víctimas de una relación que a veces nos oprime y al romperla somos también víctimas de esta ruptura.
Si la mujer no retrasa la maternidad, sufre las consecuencias de una organización social patriarcal que no permite conciliar vida laboral y vida privada. Así, las madres que trabajan se ven obligadas a aceptar jornadas parciales con la consiguiente pérdida retributiva, se estancan en su ascenso profesional, cuando no se ven obligadas a abandonar el mercado de trabajo.
2.- Sufrimos directamente los efectos de la crisis económica porque el contrato laboral sigue siendo el requisito indispensable para la regularización
En caso de renovación de tarjetas de Residencia y Trabajo se exigen 6 meses de cotización por año y contrato de un año por lo que en el actual contexto de desempleo posibilita que muchas familias ya establecidas y con menores a cargo, no puedan cumplir los requisitos exigidos y se queden sin papeles.
Para las mujeres que ejercen el trabajo sexual, sector laboral en el que no se puede acceder a un contrato de trabajo; la Ley de Extranjería propicia las expulsiones masivas. Ahora además la Incívica Ordenanza del Ayuntamiento de Barcelona, las echa de las calles y se vuelve proxeneta al tener un afán recaudatorio con elevadísimas multas, cuando los locales de alterne no significan ni un contrato ni una protección laboral, sólo más explotación.
En caso de renovación de tarjetas de Residencia y Trabajo se exigen 6 meses de cotización por año y contrato de un año por lo que en el actual contexto de desempleo posibilita que muchas familias ya establecidas y con menores a cargo, no puedan cumplir los requisitos exigidos y se queden sin papeles.
Para las mujeres que ejercen el trabajo sexual, sector laboral en el que no se puede acceder a un contrato de trabajo; la Ley de Extranjería propicia las expulsiones masivas. Ahora además la Incívica Ordenanza del Ayuntamiento de Barcelona, las echa de las calles y se vuelve proxeneta al tener un afán recaudatorio con elevadísimas multas, cuando los locales de alterne no significan ni un contrato ni una protección laboral, sólo más explotación.
3.- La nueva Ley de extranjería consiente la violencia de género porque permite la incoación de procedimientos de expulsión a mujeres maltratadas que se encuentren en situación de irregularidad y acudan a interponer una denuncia contra el esposo.
En la actualidad, una mujer maltratada puede denunciar para alcanzar una tarjeta provisional de residencia y trabajo hasta que concluya el juicio, cabe señalar que dicha tarjeta no permite la reagrupación de las hijas e hijos a su cargo con la consecuente situación de desamparo de los menores. Pero si el procedimiento penal fuera desfavorable a la mujer o archivado, perdería el permiso de residencia siendo abocada a la irregularidad administrativa y podría ser expulsada.
En la actualidad, una mujer maltratada puede denunciar para alcanzar una tarjeta provisional de residencia y trabajo hasta que concluya el juicio, cabe señalar que dicha tarjeta no permite la reagrupación de las hijas e hijos a su cargo con la consecuente situación de desamparo de los menores. Pero si el procedimiento penal fuera desfavorable a la mujer o archivado, perdería el permiso de residencia siendo abocada a la irregularidad administrativa y podría ser expulsada.
Cuando a la población inmigrada se le recortan los derechos elementales, significa que a corto plazo se recortarán los derechos a las mujeres catalanas y españolas. Debemos comprender que las mujeres de aquí y de fuera no estamos enfrentadas, tenemos los mismos problemas: Vivienda, sanidad, formación, guarderías, atención en la 3ª edad; tenemos que construir caminos para conocernos, para romper con las diferencias, para luchar unidas por la igualdad de derechos y una real libertad en una sociedad abierta, sin racismo, sin prejuicios.
Por todo esto exigimos:
Igualdad de derechos
Trabajo y salario digno para todas,
Derogación de las leyes que discriminan a las mujeres
Derogación Ley de Extranjería
Trabajo y salario digno para todas,
Derogación de las leyes que discriminan a las mujeres
Derogación Ley de Extranjería
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